¿Y quén será mi compañera? [Priv. Nadieyja E. Lionheart]

Después de salir de la Academia al conocer a William Wright, Angelique pensó que si volvía rápido al parque se encontraría de nuevo con Evangeline, realmente no pensaba que fuera capaz de encontrarse de nuevo, pero no perdería nada al volver, bueno... tal vez un poco de tiempo, pero eso no importaba, en estos momentos le sobraba bastante de su tiempo, asi que ahora no era de importancia.

Como sus instintos lo decían, Evangeline no se encontraba, asi que fue de nuevo a la Academia Leboeuf, para cambiarse y descansar un poco, tal vez entrar en la computadora, o jugar en una de sus consolas. Al llevar, pudo darse cuenta de que habían dos camas, lo que significaba que compartiría cuarto con alguna otra chica, ¿o algún chico? no, eso era imposible, suspiró y se quitó la ropa, mientras se colocó una toalla, por si su compañera entraba no la viera en su traje de Eva. Caminó hacia la ducha y se tomó su merecido baño.

Luego de bañarse, se cambió de ropa, aunque sus ropas no eran para nada distintas, más bien eran las mismas. Colocó la toalla en su cabeza, para lograr quitar todo el agua de sus cabellos, y después de eso, se acostó en su cama, eran dos literas, si a su nueva compañera no le importaba, ella quería la de arriba, pues le gustaba más las alturas, y podía ver el televisor mejor allí. Luego de unos segundos con los ojos cerrados, escuchó como la puerta de la habitación sonó, pues alguien entraba, eso significaba que su compañera, había llegado, las ropas de Angelique y toda sus pertenecias estaban en un closet a la derecha, y al lado de este, había otro closet. Se paró de la cama y esperó a que la chica abriera totalmente la puerta para recibirla con una sonrisa.

Al ver como su nueva compañera entraba a la habitación pudo darse cuenta que su estadía en el dormitorio sería completamente divertido, sonrió y rió al ver a su compañera. - Mucho gusto, mi nombre es Angelique Leboeuf - Dijo con una sonrisa, y dandole una pequeña reverencia a la chica, de cabellos negros y largos.

Le ofreció su mano derecha estirando su brazo para poder ayudarla a levantarse, por los minutos que llevaban juntas, sabía que se iba a divertir bastante, o eso pensaba. Esperó mientras su nueva compañera decía o hiciera algo.

La chica estiró las mejillas de Angelique, por lo cual, Angelique no pudo hacer un pequeño puchero se dibujó en sus labios. Angelique sonrió forzadamente por el movimiento de las manos de la chica en las mejillas Angelique, al rato la chica de cabellos oscuros soltó sus mejillas y se alejó un poco. La chica realmente era... rara, Nadieyja Lionheart, señoria corazón de león, ya había leído su expediente, pues acababa de recordarse todo de esta chica, su poder era tan interesante y extraño como ella misma... era como una piedra sin pulir, algo le esperaba a esta chica, en fin, Angelique no es oráculo asi que shh.

Escuchó con atención lo que la chica dijo, rió y sonrió por su comentario. - Creo que me lo tomaré como un cumplido. - Dijo refiriendose a que se parecía a una muñequita, en cierto aspecto, si parecía pero no creo que era para tanto... Dijo que la llamara Lina, lo cual le parecía un lindo sobrenombre, sonrió pero luego su sonrisa se desvaneció cuando escuchó que la llamaría Chibi.

La miró seriamente, como si la fuera a reprender, y luego se hechó a reir, cuando terminó de reirse, colocó la sonrisa característica de los ángeles, aquella linda, tierna e inocente que todos reconocen. - Por mí estarás bien Lina-chan - Dijo de nuevo con aquella sonrisa.